viernes, 25 de septiembre de 2015

Big Brother y el regreso de la decadencia social.



¿No habíamos superado esto ya? ¿Qué acaso no nos habíamos dado cuenta como sociedad que esto era realmente innecesario? Aparentemente no. No estoy para nada sorprendido con el regreso de esta reverenda pendejada, así como tampoco estaré sorprendido cuando vea a tres cuartas partes de la población del país estar pegadas a sus putas teles, como lo han estado siempre, viendo emerger del abismo nuevamente a ese enorme mounstro llamado reality shows.
Por si el puto señor de los cielos no era suficiente para destrozar nuestros coeficientes intelectuales, big brother ha vuelto. ¿Para que? ¿Para que chingados regreso? ¿apoco ya se te acabaron las ideas, televisa?
Por si no sabes en que consiste este pedo, es realmente simple: agarras a quince mireyres y lobuquis fresones de mierda, les quitas sus privilegios y luego los ves vivir. Esto significa verlos como realmente son. ¡Guacala!
¿Esto es entretenimiento? Ver gente vivir. Esto implica verlos comer, bañarse, tratar de coger (y tratar en verdad) andar en calzones, etc, etc. Claro que televisa esta conciente de todo esto, es por eso que te trae hasta tu hogar a la creme de la creme de nuestra amada sociedad. Niños de papi adictos al gimnasio, al antro y que, según ellos, las pueden todas, con el simple sueño de ser famosos un año, quizás menos, después de la finalización del programa. Reality shows, la forma mas sencilla de volverte famoso.
Gueyes que son unos penes con pies, con la idea en sus cabezas de que son galanes de la talla de Mauricio Garcés, mujeres con exceso de maquillaje con tetas de plástico y la boca de un albañil, juntos en una casa durante chingos de días.
Realmente la verdadera competencia no es sobrevivir (aunque para ellos quizás si lo sea si nos ponemos a pensar de que, al ser niños de papi, no saben hacer un carajo) ya que hay niños de la calle que en verdad luchan por sobrevivir y no les han mandado su premio. La verdadera competencia aquí es vivir con gente igual de nefasta que tú. El morbo es el motor principal de este programa.
Y vaya que en esta medre meten a cada personaje. Lo vimos en el primero big brother con liandras de la talla de azalea y la mapacha, luego vinieron las chichis de la chiva. El siguiente paso fue meter “artistas” (ser conductor no es ser un puto artista) y al final televisa llego a la cúspide con “el bar provoca” que básicamente era lo mismo, pero con las morras mas putas que pudieron encontrar.
Ahora hemos regresado al principio. Gente fresona viviendo como personas de clase media con otros gueyes fresones que no saben que chingadas madres pasa con el universo.
Vamos sociedad, somos mejor que esto.
Realmente no me parece que esto tenga chiste, pero si tiene potencial. Como en big brother las reglas cambian, deberían meter un asesino serial unos días, a ver que pasaba.
-hola, mi nombre es Mauricio Lozoya, pero en el bloque cuatro de la prisión en la que cumplo mi condena me llaman “el come niños”. Soy responsable de violar y descuartizar a 21 niños en algunas colonias de Mexicali. Estoy cumpliendo una condena de 126 años. Me gusta el soccer, cocinar y los gritos de agonía de mis victimas cuando los corto con la segueta. No me gusta la gente que no es autentica. Espero que nos llevemos muy bien.
Eso definitivamente es algo que yo si vería.
No seguiré el transcurso de esta mierda, por que es mierda. Basta, televisa, basta de empinarnos con tus estúpidos programas morbosos de mierda.
Como conclusión solo diré que no puede ser posible que estos pinches programas sigan transmitiéndose y aun peor, que la gente los siga viendo.
Chinga tu madre, sociedad. Me das un chingo de asco.

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